Gas envasado

El gas es una alternativa versátil que ofrece distintos formatos adaptados a las necesidades específicas de cada usuario y negocio. Te presentamos todos nuestros productos:

BUTANO Y PROPANO

Botella tradicional 12,5 Kg.

Nuestra botella tradicional. La bombona de butano de 12,5 kg te permite pagar solo por lo que consumes, sin términos fijos, suponiendo un gran ahorro económico. Está especialmente diseñada para el ámbito doméstico y te ofrece multitud de usos: puedes utilizarla para cocinar, para la calefacción en estufas, para generar agua caliente sanitaria,…

Botella 12 Kg ligera (NEL)

Un nuevo envase ligero y novedoso ideal para el ámbito doméstico que cuenta con la cantidad de gas necesaria para el consumo diario, 12 kg.

Fabricada con acero ligero de alta resistencia y asas de plástico para facilitar su manejo. Es compatible con cualquier aparato de gas butano.

El alto poder calorífico del gas butano te permite ahorrar en costes energéticos, además de que pagas solo por el gas que consumes.

Butano pequeña 6Kg K6.

La bombona K6 es tu mejor aliada para disfrutar tanto de tus planes al aire libre como en el interior de tu hogar. Un diseño moderno, ligero y de alta resistencia pensado para adaptarse a cualquier situación.

Su formato pequeño también es compatible con las instalaciones tradicionales de gas butano.

Bombona Autogas 12Kg.

Consigue la autonomía que tu carretilla necesita. Con un diseño innovador, el gas llega al vehículo libre de impurezas, garantizando su calidad y seguridad.

Botella propano 11 Kg.

El poder calorífico de una energía como el propano transportable a cualquier lugar.

Ideal para utilizarse en condiciones de consumo intensivo y en zonas de baja temperatura ya que proporciona la energía suficiente que necesitas para generar calor de forma más rápida gracias a su alto poder calorífico. Tiene una gran variedad de usos tanto para ser utilizada en tu hogar como en tu negocio.

Botella propano industrial 35 Kg.

Larga duración y mayor volumen de tu energía de siempre.
Su instalación es muy sencilla, ubicándose en una caseta en el exterior en baterías de descarga simultánea de manera que la mitad se encuentre en funcionamiento y la otra mitad en reserva. Cuando se agotan las primeras entran automáticamente en funcionamiento las de reserva, obteniéndose un suministro ininterrumpido de gas.

Su uso es marcadamente industrial o comercial, para aquellas ubicaciones donde no es posible utilizar un depósito de gas a granel, aunque cada vez son más utilizadas en instalaciones domésticas donde se precisa de una mayor capacidad de almacenamiento.